La industria del aguacate y sus integrantes se encuentran comprometidos con las prácticas sostenibles, hecho que les permite mantener una producción exitosa, y para mantenerla así, dependen de la conservación del medio ambiente natural, suelo, bosques y agua, así como de la seguridad económica de las comunidades fundamentales en Michoacán. 

La promoción de prácticas agrícolas responsables es un pilar primordial de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM). Esto es, debido a que la misión de la asociación no solo es ofrecer a los mercados nacionales e internacionales un producto de la más alta calidad, sino cultivar, cosechar y exportar el fruto de manera sostenible, y al mismo tiempo brindar prosperidad a las comunidades productoras del aguacate en la región. 

Alineado a esto, desde 2018, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) fue renegociado, con lo que se tuvo como resultado, el nuevo Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC), entrando en vigor en 2020. Dicho tratado ha ampliado la apertura entre los mercados de América del Norte, y elevó los estándares para el comercio libre y justo, particularmente entre agricultores y empacadores. 

Impulsada por estas reformas, y en cooperación con el USDA , la APEAM ha confirmado su dedicación por las prácticas ambientales responsables y su atención a los problemas laborales de la industria, mediante la creación de la Agenda Verde. Un informe de investigación integral que brinda un diagnóstico de la sostenibilidad de la industria del aguacate en Michoacán. 

Sus hallazgos otorgan información sobre la alineación de los viveros, huertos, recolectores, empacadores, exportadores y consumo de aguacate en Estados Unidos. El objetivo del proyecto es lograr un mayor nivel de sostenibilidad dentro de la industria y las comunidades de Michoacán, al tiempo que aumenta la competencia positiva y las prácticas agrícolas responsables. 

Este tipo de estrategia sostenibles, de la industria mexicana del aguacate, están alineadas oficialmente con la agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU.  Por ello, en septiembre de 2020, se firmó un acuerdo entre APEAM y la ONU, el cual representa un compromiso verde que resonará en las futuras generaciones de huertos de aguacate en Michoacán, en México y el mundo. 

Aproximadamente 29 mil productores de aguacate en Michoacán exportan su fruta a Estados Unidos, con ello, pueden mantener a sus familias y asegurar su negocio para el futuro. Por lo tanto, es de suma importancia proteger esas tierras y comunidades, con este tipo de acciones,  para así ayudar al crecimiento y mantenimiento de los agricultores. Y con esa convicción, el cuidado de los habitantes, la tierra y el agua, forman parte del corazón de la Agenda Verde en la industria del aguacate. 

Aunque abastecen más del 80% de los aguacates que se consumen en Estados Unidos, los huertos de aguacates en Michoacán representan menos del 2.5% de todo el estado. La mayoría de estos huertos son superficies pequeñas: el 67% de los huertos ocupan menos de 10 hectáreas y otro 25% ocupan entre 10 y 30 hectáreas. La mayoría de estas superficies son administradas por generaciones de productores de Michoacán, cuyas familias históricamente han dependido de la tierra. La capacidad de estas huertas familiares para mantenerse a sí mismas proviene directamente de la tierra, y por lo tanto de su protección.

Las regiones productoras de aguacate brindan un refugio verde para las personas cuyo sustento ha estado ligado a la tierra durante generaciones. Los aguacates crecen en altitudes entre 2,000 y 10,000 pies. En Michoacán, los huertos se colocan en diferentes alturas que forman muchos microclimas diferentes. Esto apoya un ciclo constante de cuatro floraciones, que aseguran una cosecha constante en cada temporada. 

Mientras tanto, el rico suelo volcánico de la zona proporciona nutrientes a los árboles de aguacate y los bosques circundantes; actúa como un fertilizante natural, lo que reduce la necesidad de usar agroquímicos en los huertos. A su vez, los árboles y los bosques proporcionan temperaturas estables y predecibles, atrapando la humedad que reduce la erosión del suelo. La armonía entre el suelo y los árboles de Michoacán actúa para mantener la temperatura natural perfecta para el crecimiento del aguacate (entre 7 °C y 30 °C) mientras apoya la biodiversidad del área. 

Es así, que para proteger la sostenibilidad, los huertos de aguacate en Michoacán, que deseen exportar sus frutos deben seguir ciertas pautas, las cuales están bajo la supervisión de la APEAM:

  • No cazar.
    Esto protege la biodiversidad natural del área y crea un equilibrio dentro del ecosistema.
  • No pastoreo de ganado.
    Esto salvaguarda la limpieza del suelo, el nivel freático natural y la flora local que crece en las arboledas y principalmente evitar la compactación del suelo.
  • Capacitación a los trabajadores.
    Capacitación a los trabajadores  enfocado en buenas prácticas agrícolas y cuidado del medio ambiente
  • Análisis de sangre regulares.
    La realización de análisis de sangre va dirigido hacia al personal ocupacionalmente expuesto que  son los responsables de las aplicaciones químicas al cultivo esto  con la finalidad  de la determinación del nivel de La  enzima acetilcolinesterasa se encuentra en el tejido nervioso y en los glóbulos rojos.  Este análisis  puede ayudar a determinar el riesgo de intoxicación y resultados de alguna enfermedad hepática donde es recomendado clínicamente realizar cada año.

Todas estas implementaciones forman parte de un conjunto de acciones que permiten a los productores asociados continuar con sus cosechas sostenibles y así asegurar un futuro para sus familias. Por ello, la Agenda Verde es un informe técnico y de diagnóstico en curso. 

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